Cuando en una pareja los momentos de fricción y desencuentro superan a los de satisfacción, y cada vez hay una mayor sensación ruptura y de fracaso, llegó el momento de contratar un buen bufete de abogados especializados en divorcios, como es el caso del despacho del abogado Ferrer Navarro, en Valencia, donde te informarán sobre los distintos tipos de procedimientos y después de estudiar el caso concreto resolverán tus dudas, tanto sobre las cuestiones legales como las económicas. Incluso si hay hijos menores fruto del matrimonio te aconsejarán sobre el Convenio Regulador, así como sobre las cuestiones referentes a guarda y custodia y patria potestad.
Pero antes de llegar a esto, es conveniente que sepamos cuáles son los principales motivos de distanciamiento de la pareja por si pudiéramos ser capaces de evitarlos o no llegar a ese extremo por la persona a la que un día elegimos.
- En tiempos de crisis económica como son los que actualmente estamos viviendo, la falta de trabajo, y con ello la falta de dinero, es uno de los principales motivos de discusión y de distanciamiento en las parejas, pues puede llevar a hacerse reproches mutuos sobre la forma en que cada uno gasta lo que la familia ingresa.
- La falta de respeto. Cuando las peleas son muy frecuentes, se puede ya llegar a unos extremos donde se pierda el respeto mutuo, llegando a insultos y a desprecios, lo que hace que la fractura del matrimonio sea total.
- Terceras personas. Si uno de ellos comienza una nueva relación sentimental, aunque sea corta en el tiempo, estas infidelidades y engaños hacen que la confianza en la pareja se debilite y se instale en ella la inseguridad.
- Falta de independencia económica de una de las partes de la pareja. Aunque cada vez es mayor el número de parejas que ante la falta de trabajo y con la llegada de los hijos optan voluntariamente y de común acuerdo por que se quede en casa la parte de la pareja que menos ingresos económicos genera, a veces esto trae consecuencias negativas, porque puede llegar a sentirse menos útil y a generarle sentimientos encontrados, lo que influirá de manera incorrecta en la pareja.
- Es importante mantener proyectos en la vida, mantener las ilusiones, hacer viajes, cosas en común, como bailar, pasear…, pues el aburrimiento lleva a la falta de comunicación en la pareja, y acaban convirtiéndose en dos extraños.
- Celos. La persona que los sufre se siente completamente insegura de los sentimientos de la otra persona, por lo que hace que dude continuamente de ella y de todos los que se acercan a ella. Puede llegar a ser una enfermedad.
- Apariencia física. Cuando nos enamoramos solamente de la parte física, sin atender a la parte interior de cada persona, no la estamos valorando como se merece. La apariencia física y el enamoramiento pronto desaparecen, y enseguida nos encontramos con la cruda realidad de que si no hay amor no queda nada.
- Cargas de parejas o matrimonios anteriores. Sucede a menudo que nos encontramos con que la pareja con la que nos casamos viene de otras relaciones anteriores, por lo que puede tener hijos de esta otra etapa. Esto al principio podemos pensar que podemos superarlo, pero con el paso del tiempo puede ser una carga demasiado pesada y fuente de continuos conflictos.
- Por adicciones, como pueden ser el alcohol, las drogas… Este es un grave problema que necesita ayuda de profesionales especializados, como psicólogos, pues causan un desequilibrio emocional e incontrolable en la persona. Cuando la adicción se produce en la parte masculina de la pareja puede llegar a provocar escenas de violencia de género sobre la mujer o violencia doméstica sobre cualquier otro miembro de la unidad familiar, como pueden ser los hijos.