Farmacias: un negocio de lo más particular

El mercado es diferente para cada sector y clase de negocio. El funcionamiento de ese mercado y sector es algo que solo los propios integrantes del mismo pueden comprender y que es fundamental saber para tener opciones de alcanzar el éxito empresarial por el que tanta gente suspira. Es evidente que comprender esto no es, en absoluto, algo sencillo. Existen equipos de personas preparados para ello y que única y exclusivamente se dedican a esto. Si no fuera por ellos, el mercado sería lo más parecido a un jeroglífico.

Uno de los mercados que funciona de una manera cuanto menos peculiar es el que afecta a las farmacias. Este tipo de negocios tienen que desafiar a una serie de situaciones que son atípicas en otros sectores y que una persona no acostumbrada a trabajar en este sector no podría entender de la noche a la mañana. Es evidente que las cosas son así en este mercado en concreto por una cuestión de necesidad. Y es que una farmacia no es el mismo tipo de negocio que una tienda de moda. Aquí no solo importa el dinero. También tiene mucho que ver el bienestar de la sociedad.

Uno de los asuntos que sin lugar a dudas más marcan a un negocio como lo puede ser el de la farmacia es la cantidad de restricciones que se tienen al entrar al mismo. En primer lugar, porque la legislación así lo requiere. Y, en segunda instancia, porque está fijado el número de farmacias que debe haber en un lugar concreto, algo que no sucede en ningún otro sector y que evidentemente afecta a todas aquellas personas que tienen un proyecto como la apertura de una farmacia entre ceja y ceja.

El portal web Portal Farma informó el 13 de abril de 2018 de la apertura de la farmacia número 22.000 en el territorio español, un número que puede parecer muy elevado pero que, teniendo en cuenta la distribución en la que se encuentran y el número de personas que residen en España no es para tanto. Aún así, el artículo de Portal Farma indica que la red que tenemos en España en única a nivel europeo, no pudiendo ningún país igualar el ratio de número de habitantes por farmacia al que tiene España.

La limitación del número de farmacias en el territorio nacional es la mayor barrera de entrada a este tipo de negocio en nuestro país. Así nos lo han contado los principales responsables y dirigentes de la farmacia San Félix 75 de Castellón. Hablando con ellos nos ha quedado claro que la regulación que afecta a este sector (en el que, por cierto, los precios de los productos están fijados por Ley) es tal que muchos proyectos de farmacia terminan cayendo por su propio peso tarde o temprano.

Un negocio que también conlleva ventajas

El negocio de las farmacias también presenta algunas ventajas que es conveniente no olvidar. En primera instancia, hay que hablar de esas limitaciones en lo que al número de estos negocios se refiere, que afecta en tanto en cuanto que el mercado no está atomizado. En segunda instancia, hay que decir que, al ser los productos que se venden en ellos de primera necesidad, la gente los va a seguir comprando sea cual sea la situación económica en la que se encuentre el país. La gente tiene claro que con la salud no se juega. Lógico y normal.

Es evidente que el hecho de disponer de un material de este estilo es indispensable para tener negocio durante todo el año y al margen de situaciones económicas mejores o peores. La importancia que tienen los productos farmacéuticos en la vida diaria y cotidiana es tal que forma parte de las necesidades consideradas como básicas por una inmensa mayoría de las familias en los tiempos que corren y así lo va a seguir siendo en los próximos años y a largo plazo. La razón es evidente: todos queremos superar nuestros problemas de salud cuanto antes.

Que nadie piense que un negocio como lo es una farmacia es mucho más fácil de gestionar y es más dado al éxito como consecuencia de la necesidad que tiene la gente de los productos que pone a disposición del público. Ya hemos visto que existen barreras de entrada muy potentes y que son capaces de hacer que un proyecto de farmacia se quede en eso, en una simple idea. Trabajar duro y sacrificarse también es algo habitual en el sector y solo quien sea capaz de hacerlo y de adaptarse a las condiciones especiales de este sector conseguirá disponer de un buen grado de éxito.