España y el uso de energías renovables

Los problemas ambientales son graves y estamos llegando muy tarde como sociedad a buscar las soluciones, y no solamente en España, sino a nivel mundial, y es que  todos como ciudadanos y a título personal hemos sido descuidados e irresponsables con el medio ambiente, y obviamente, los gobiernos mundiales también lo han sido.

Por esta irresponsabilidad, los problemas que existen a nivel ambiental son tan profundos que de no tomar las medidas y aplicarlas de manera estructurada, el planeta perderá la totalidad de sus recursos en menos de 200 años. Si bien esta parece una cifra muy grande desde el punto de vista histórico es muy poco y los riesgos son muy grandes. Lo que significa que si queremos revertir los daños, se debe actuar de forma inmediata.

Una de las maneras más positivas de disminuir los agentes contaminantes a nivel general, es con la implementación de sistemas que utilicen las energías renovables como su materia prima. Y esto es fundamental para la salud del planeta. Cuando hablamos de este tipo de energías, nos referimos a lo que podemos definir como aquellas que se obtienen de fuentes naturales, que son inagotables y que no suponen ningún tipo de contaminación para el medio ambiente, puesto que se regeneran por ellas mismas.

Si consideramos esto y nos enfocamos en cómo es el territorio y lo particular que es, podemos entender por qué España es uno de los países que más podría beneficiarse de la apuesta por las energías renovables. Y si bien es cierto que el camino se comenzó a andar, también es cierto que a día de hoy los objetivos están muy lejos de verse cumplidos.

¿Qué tipo de energías renovables pueden ser implementadas en España?

Atrás quedó la época en la que las energías renovables eran sólo las que estudiamos en la escuela. Gracias al avance de la ciencia y las tecnologías, en la actualidad hay 7 tipos de energías verdes que son fundamentales para revertir o disminuir el impacto ambiental y los agentes contaminantes. Según los especialistas de la Federación Nacional De Empresarios De Instalaciones De España (FENIE), en España podemos encontrar 3 de ellas, que son:

  • Energía eólica

Este tipo de energía se consigue mediante la fuerza del viento; lo que significa que se aprovecha la energía cinética de las corrientes de aire para mover unas gigantes turbinas eólicas capaces de convertirla en energía eléctrica. Este tipo de energía es una de las más aprovechables, porque su producción no tiene apenas coste más que el de instalar parques eólicos y porque su incidencia es de las más elevadas. Es además una energía limpia que no contamina, por lo que su uso tiene únicamente ventajas a largo plazo.

El uso de energía eólica en España en este momento es capaz de cubrir aproximadamente el 18% del total de demanda eléctrica anual del país. Este dato es muy importante de reconocer, pues implica que España es el tercer país del mundo en cuanto a potencia de energía eólica instalada, por detrás de Alemania y Estados Unidos.

En la actualidad existen 4 empresas de energías renovables en España, que se dedican a la fabricación e instalación de aerogeneradores, y se aspira que la tendencia de crear e instalar parques eólicos parece que sigue en aumento, lo que significa que en los próximos años se puede aumentar el porcentaje de energía eléctrica anual producida por este tipo de tecnologías.

  • Energía hidráulica

Este tipo de energía se obtiene a partir del propio movimiento del agua en ríos y saltos de agua. Y funcionan gracias a la construcción de centrales hidroeléctricas en lugares estratégicos que puedan aprovechar dicho movimiento y energía del agua para hacer funcionar un generador eléctrico, de donde se obtendrá la energía eléctrica. La ventaja de este sistema es que produce energía limpia y autóctona.

La desventaja del uso de este tipo de producción energética, es que se requiere una infraestructura determinada y que obviamente para poder producirla, se necesita de las condiciones climatológicas adecuadas. La central hidroeléctrica con mayor producción actual es la de Aldeadávila, situada en Salamanca, en el río Duero.

En la actualidad, el porcentaje de energía hidráulica producida en España es del 18,5% Una proporción que ha disminuido paulatinamente en los últimos años por el uso de otros tipos de producción energética.

  • Energía solar

Cuando se habla de producir energía solar, basta con instalar colectores capacitados para recoger la radiación del sol, a través de paneles solares capaces de transformar esta energía en energía térmica o energía eléctrica.

La tendencia en el futuro cercano es la de instalar nuevas plantas de energía fotovoltaica y puntos de aprovechamiento de la energía solar, pero todavía queda mucho por hacer hasta llegar a unos niveles adecuados de producción de energía, pues una de las asignaturas pendientes de España en materia de energías renovables tiene que ver directamente con la energía solar, o con la falta de ella en toda la península.

España es uno de los países de Europa y también del mundo con mayor cantidad de horas de sol durante todo el año, por lo que lo ideal es aprovecharlas de una forma que genere beneficios a nivel general para la población y la industria. Pero, hasta el momento, esto solo se traduce en un 5% de la demanda total de energía eléctrica del país, un porcentaje evidentemente menor que en las dos anteriores, que las sobrepasan casi en un 13%.

¿Cómo es el proyecto de España para impulsar el uso de las energías renovables?

España se ha propuesto alcanzar la descarbonización de su modelo energético para el año 2050. Este reto supone avanzar en energías alternativas, menos contaminantes y a su vez, crear una oportunidad de generación de empleo y crecimiento económico. La Ley de Cambio Climático y Transición Energética establece este horizonte en dos fases:

Fase 1  (Planificada para el 2030)

  • Reducir como mínimo un 20% las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) respecto a las cifras de 1990.
  • Generar al menos el 74% de electricidad con energías renovables.
  • Asegurar el 35% del consumo final de energía procedente de fuentes alternativas.
  • Mejorar la eficiencia energética en un 35%.

Fase 2 (Planificada para el 2050)

  • Alcanzar el 100% de energías renovables.
  • Reducir la emisión de gases de efecto invernadero en un 90%, en base a la Agenda 2030 y el Acuerdo de París contra el Cambio Climático.

Para conseguir estos objetivos a nivel nacional, se han planificado incrementos de capacidad de generación renovable (energía eólica y energía fotovoltaica) de al menos 3 GW/año en las próximas décadas.

Consumir energías renovables a nivel personal es posible

Al comienzo de este artículo, hicimos mención a las responsabilidades individuales. Cada día y gracias a la información de la que hoy disponemos, es muy fácil buscar opciones que nos generen los mismos beneficios, siendo más amigables con el medio ambiente.

En la Comunidad Europea existe un organismo llamado Sistema de Garantías de Origen y Etiquetado de Electricidad. Este le proporciona a los productores de energía verde (es decir de electricidad proveniente de fuentes renovables), por medio del sistema regulador en España, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, CNMC) una certificación de los kilovatios hora (kWh) que han producido en un año, conocido como Garantías de Origen (GdOs). Estas Garantías de Origen también pueden ser transferidas a las comercializadoras de electricidad para justificar que su origen es verde.

Un aspecto muy importante a tomar en cuenta es que todas las centrales generadoras vierten su energía, y son las comercializadoras quienes las compran para luego venderla a sus clientes. Por ello, una vez toda la energía es introducida en la red de abastecimiento, no se puede diferenciar entre las distintas fuentes de energía, renovables o no. Lo que se garantiza al usuario es que la energía consumida ha sido generada mediante fuentes renovables (eólica, hidráulica, solar). Por lo que si queremos por lo menos intentar utilizar energía verde, la recomendación es conseguir una empresa que tenga los certificados necesarios que lo avalen como proveedor de ella.

El uso de energías renovables en España y el resto del mundo, son una de las claves para reducir los efectos del cambio climático y para combatir la elevada contaminación que supone la creación de energía por otros medios. Por eso, es imprescindible aumentar la concienciación a todos los niveles y en todos los sectores, y seguir dando pasos en la dirección adecuada para la correcta conservación del medio ambiente.

Lo que es fundamental en este aspecto es que los cambios en nuestro país se den de forma paulatina, pero veloz; pues es un injusto y sobre todo, egoísta con el medio ambiente, tener todas estas oportunidades de generar una energía más limpia y sostenible, y no hacerlo no por falta de políticas que impulsen mayor velocidad a los proyectos energéticos.

Como ciudadanos tenemos una responsabilidad que cumplir y se empieza desde casa, al asumir un cambio en nuestra forma de utilizar los recursos que tenemos y buscar que quienes ocupen cargos gubernamentales se sumen a las exigencias de convertirnos en un país mucho más sostenible a nivel ambiental.