Reproducción asistida, una gran salida profesional

Son muchas las ocasiones en las que hacemos de una debilidad, una fortaleza. Que encontramos en un hueco vacío, la  mejor forma de llenarlo. Y con esto me ocurrió con la reproducción asistida. Hace años nadie podría pensar que una pareja que no pudiera tener hijos, podría ver cumplido su sueño gracias a la medicina. Nadie podría pensar que un niño que viniera enfermo podría corregirse. Todo esto se debe a los avances que ha habido en este campo. Sin duda, uno de los campos más desconocidos.

Tras muchos años trabajando en una clínica de ginecología, picada por la curiosidad, decidí hacer un curso on line Básico de Reproducción Asistida impartido por IVI Global. El objetivo de estos cursos es suministrar una herramienta que permita entender, diagnosticar y referir a los pacientes a las unidades de reproducción y evitar que éstos pierdan un tiempo valioso en el tratamiento de su problema. Por tanto, no pretenden ser un tratado de reproducción asistida o un máster, sino más bien, estos cursos online de reproducción asistida aportan un conjunto de conocimientos y pautas de actuación útiles en su ámbito de trabajo. Y la verdad es que descubrí un montón de cosas.

Sobre todo que se trata de un gran negocio. Según los últimos datos de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF), de diciembre de 2016, a lo largo de la geografía española había 383 establecimientos -públicos y privados-. Sólo Estados Unidos supera a España en el número de centros dedicados a ello. A estimular hormonalmente a hombres y mujeres y producir bebés. Con el coste que implica, que puede ser de casi 10.000 euros por intento. De ahí que pueda ser una gran salida profesional para todos esos estudiantes y estudiantes que se encuentran en las facultades y dudan de sus posibles salidas.

Una fecundación in vitro, por ejemplo, no baja de los 5.000 euros. Es más complejo que el procedimiento anterior. Se trata de unir el óvulo con el espermatozoide en el laboratorio -in vitro-, con el fin de obtener embriones ya fecundados para transferir al útero materno y que evolucionen hasta conseguir un embarazo. Seguro que te has hecho un montón de preguntas sobre la forma de funcionar.

¿Cuáles son las técnicas de reproducción asistida que reconoce la ley?

La inseminación artificial; la fecundación “in vitro” e inyección intracitoplásmica de espermatozoides procedentes de eyaculado, con gametos propios o de donante y con transferencia de preembriones; y la transferencia intratubárica de gametos.

¿Limita la ley el número de óvulos que se pueden fertilizar?

No. Anteriormente, el número máximo de ovocitos que podían fecundarse en cada ciclo reproductivo eran tres, pero ahora ya no existe tal límite. Lo que sí se mantiene es que solo se autoriza la transferencia a la mujer de un máximo de tres preembriones en cada ciclo reproductivo.

¿Es posible la intervención con fines terapéuticos sobre preembriones vivos?

Sí, siempre que se cumplan requisitos tales como que exista consentimiento de la pareja o de la madre, que se trate de enfermedades con un diagnóstico preciso, de pronóstico grave o muy grave, y existan posibilidades razonables de mejora o curación, y que no se modifiquen los caracteres hereditarios no patológicos ni se busque la selección de los individuos o de la raza. Además, serán necesarias las mismas autorizaciones e informes que para las técnicas preimplantacionales.

¿Puede una mujer por medio de estas técnicas tener un hijo de su marido fallecido y que este figure legalmente como padre?

La ley solo lo permite si los espermatozoides del marido ya estaban antes del fallecimiento en el útero de la mujer o si el hombre prestó su consentimiento por escrito para que esos espermatozoides fueran utilizados posteriormente.

Actualmente, la necesidad creciente de tratamientos de reproducción asistida para lograr descendencia ha ocasionado la necesidad formativa de especialistas en el tema. Principalmente los aspectos de laboratorio son de reciente desarrollo, y están en constante evolución. Hay muchos profesionales que no están preparados. Como has podido comprobar, el mundo de la reproducción asistida aún es el gran desconocido en España. Poco a poco se van dando pasos, pero todavía nos queda mucho por hacer. Tanto en los laboratorios, como en los hospitales y también, por qué no decirlo, en las mentes de los españoles. Lo que está claro es que hay un gran negocio por detrás que se puede explotar para beneficio de todos nosotros.