Si hay un sector que ha sido señalado durante la pandemia ese ha sido el de la restauración. Fueron los primeros en cerrar y los últimos en abrir. Siempre que hay un rebrote o la famosa curva sube, los culpables son los restaurantes y los bares. Las Comunidades se empeñan en señalar a este sector, cuando lo datos dicen que esto no es así. Los bares y restaurantes son lugares seguros. Solo son responsables (entre clientes y empleados) de menos del 3,5% de los casos totales detectados en la pandemia desde mayo de 2020.
Y lo curioso es que es el sector que más se ha empeñado en cumplir con las normas de seguridad. Cuando tú vas a un supermercado se sigue haciendo de la misma manera que cuando comenzó la pandemia. Y ahora incluso menos porque ya no hay ni restricciones a la entrada. En cambio, las autoridades la han tomado con los bares y restaurantes. Y si has ido a algún bar, seguro que has visto que allí se toman todas las medidas sanitarias, además han contado con la tecnología para poder evitar casos de contagio.
Desinfección
El primero de los pasos que han realizado los bares y restaurantes es proceder a la completa desinfección de sus centros antes de la reapertura. De esta manera han logrado eliminar cualquier riesgo de contagio y garantizar las mejores condiciones de higiene y seguridad, tanto para los clientes, como para los propios empleados. Una desinfección que hace a diario, antes de la apertura y siempre después de cada servicio, prestando una especial atención a las mesas, sillas, pomos de las puertas, vajilla y utensilios de cocina.
Guantes y mascarillas
Como hacemos todos en el día a día, todos los empleados de los restaurantes usan guantes y mascarillas, este es uno de los cambios más significativos que la Covid-19 ha dejado en la hostelería porque antes no era así. Asimismo, camareros y cocineros deberán lavarse periódicamente las manos con agua y jabón, antes y después de cada servicio. Es cierto que son unas medidas que se tendrían que haber hecho desde hace tiempo, o desde siempre, pero que ahora ya se hace más.
Las vinotecas
En muchos restaurantes también se ha apostado por el mayor control en las vinotecas. Así lo reconocen desde Vicave, expertos en botelleros a medida y vinacotecas que han logrado con la climatización de espacios una especialidad, convirtiendo espacios y zonas en auténticas bodegas climatizadas a medida, con un diseño integrado y con un control total de temperatura y humedad. El lugar perfecto para la conservación de sus vinos. Lo mismo ocurre con las máquinas de ozono que sirven para desinfectar el ambiente, ya que los estudios dicen que los aerosoles son muy peligrosos.
Cambios en el interior
Los restaurantes han tenido que reestructurar la disposición de las mesas y sillas, para garantizar la medida de seguridad mínima entre clientes. Ya no verás eso de meter muchas mesas y sillas para estar todos juntos. Además, no podrán superar el aforo del local permitido en cada fase de la desescalada. Eso depende de la situación que esté viviendo cada comunidad para ver las normas que se están imponiendo.
Los elementos
Ahora ya no verá objetos como los servilleteros, aceiteras, saleros o cartas compartidas, que hasta antes del coronavirus era habituales en las mesas a disposición de los clientes. Y que se pasaban de un lado a otro de los comensales. Tal y como nos explican desde el Centro de Olivar y Aceite, ahora tienen que producir aceite en formato individual para la hostelería. Y es que el aceite, vinagre o sal entre otros, deberán ser monodosis para evitar el contacto entre clientes. Mientras que las cartas deberán estar a la vista o ser desechables, pudiendo optar por pizarras, aplicaciones móviles, etc. Una gran inversión de dinero ha sido en poner las cartas en QR.
Geles desinfectantes
Como se ha hecho en muchos sectores, la seguridad para prevenir contagios es esencial, por eso el restaurante deberá poner a disposición de los clientes geles desinfectantes, para que puedan lavarse las manos siempre que lo deseen, siendo obligatoria la desinfección antes de entrar y al salir del restaurante.
Ya has visto que los restaurantes y los bares han puesto mucho de su parte para poder cumplir con los requisitos que desde la administración les ha puesto. No es justo que a otros sectores no se les esté poniendo tantas trabas. Y es que se puede decir claramente que los restaurantes y los bares están pagando los platos rotos de todos los casos y las olas que está viviendo este país. Cuando no es así.